sábado, 8 de noviembre de 2014

Cuando ruge la tribu machista en las redes



No me explico cómo todavía seguimos teniendo pescado en las lonjas y mercados de este país. Sabido es que por la boca muere el pez. Y en los últimos días, ha habido una altísima mortandad de peces. Circunspectos varones de sesudos pensamientos han dejado aflorar en las redes sociales su verdadero yo. Primero han exigido la dimisión de los dos viajeros peperos con gustos afines en las islas Canarias. A continuación, han investigado quién era la afortunada y no han escatimado la adjetivación hacia la mujer, comenzando por el exabrupto de cuatro letras más conocido y usado en España cuando se quiere zaherir a una fémina: puta. Y eso, los que tienen estudios...


Reconozco que es un argumento manido. Vamos a darle la vuelta a la situación... Dos políticas cualesquiera, del partido que se les ponga por montera, que viajan a costa del erario público con asiduidad a la España insular para ver a una amigo que, mire usted, tienen en común. Supongo, ignoro ese detalle, que sin coincidencia en el tiempo.

Me temo que las adjetivaciones variarían poco. Ellas serían una frescas, y ya no tanto por pagarse los viajes con nuestros impuestos, si no por vivir la vida sin prejuicios. Y él amigo canario un individuo al que habría que poner un monumento dadas sus características masculinas. 

Justo lo que está ocurriendo ahora. El senador y el diputado han pecado civilmente contra la ciudadanía por utilizar indebidamente fondos públicos. Eso está muy mal. No sólo deben restituirlos. Además, los dos, han de dimitir. Uno ya lo ha hecho, aunque a empujones de una mujer, por cierto. No se les ha cuestionado la moralidad de sus acciones, ni tiene por qué, conste. En cambio, a la mujer con la que se veían en Canarias ya se le ha diseccionado su intimidad por activa y por pasiva. Sabemos de su vida privada casi todo. De esos señores políticos ni siquiera sé si están casados. 


Y esto lo cuelga, y se queda tan pancho, un señor muy respetable, profesor de universidad, experto en no sé cuántas cosas que, al afearle la conducta, deja de seguirme por twitter. Cosas curiosas de la conducta masculina. 

Ahora ya se hacen apuestas sobre si será esta mujer o la supuesta novia del pequeño Nicolás, con un alias absolutamente denigrante, la primera en pasar por televisión. Y, ¿por qué no van a contar su historia los auténticos protagonistas? 

¿Qué tipo de periodismo es ese? ¿Y qué tipo de neomachismo, como dice Miguel Lorente, se enmascara bajo la apariencia de hombres civilizados, igualitarios, que critican la violencia machista? Son los mismos que están ciegos ante este tipo de conductas, que no son capaces de discernir que, aunque no haya sangre de por medio, esto es tan violencia machista como matar a la propia mujer. Además con una agravante: el aplauso y la aquiescencia del resto de los machos de la tribu.

No hay comentarios:

Publicar un comentario